Puedes considerar la terapia ocupacional asistida con perros si notas que tu hijo/a tiene dificultades en áreas clave de su vida diaria, como la comunicación, el juego, la alimentación, las destrezas motoras, o la adaptación a diferentes entornos. Si tu hijo/a parece frustrado/a con tareas cotidianas, tiene dificultades para socializar o muestra altos niveles de ansiedad en determinados momentos del día, la terapia con perros puede ser una excelente opción. Los perros pueden motivar y calmar a las personas, haciendo que el proceso de aprendizaje y desarrollo sea más agradable. Consultar con un profesional puede ayudarte a evaluar mejor las necesidades específicas de tu hijo/a.

La entrevista basada en rutinas es una parte fundamental de nuestro enfoque. Durante esta conversación, no solo observamos las rutinas diarias de tu hijo/a, sino que también hablamos sobre las prioridades de intervención, teniendo en cuenta tanto tus inquietudes como mi criterio profesional. Esto nos ayuda a entender mejor las necesidades de tu hijo/a y a diseñar un plan de intervención personalizado que se ajuste a su vida diaria y a las metas familiares.

Cada sesión dura aproximadamente 1 hora, con 45 minutos de trabajo directo con tu hijo/a y 15 minutos de feedback y pautas para la familia. Este tiempo nos permite abordar las necesidades específicas de tu hijo/a y colaborar contigo para apoyar su desarrollo en casa.